Mientras tanto, el futuro del proyecto del Corredor Económico India-Oriente Próximo-Europa queda en pausa debido a la situación.
El puerto de Ascalón en Israel, junto con su terminal petrolera ubicada a escasos 10 kilómetros de la frontera con la Franja de Gaza, se han visto forzados a cerrar sus operaciones debido al conflicto en curso entre Israel y el grupo islamista Hamás. Esta información ha sido confirmada por fuentes marítimas y comerciales. Es importante destacar que, a pesar de este cierre, los puertos de Haifa y Ashdod permanecen operativos. Sin embargo, la empresa estatal israelí Europe Asia Pipeline Company (EAPC), que administra una terminal clave en Ascalón, no ha proporcionado comentarios de manera inmediata, según lo reportado por Reuters.
Impacto en los Nuevos Corredores Comerciales:
El Corredor Económico India-Oriente Próximo-Europa (IMEC), respaldado por Washington durante la reciente cumbre del G20 en Nueva Delhi y considerado un rival occidental de la Iniciativa del Cinturón y Ruta de la Seda de China, enfrenta una pausa inesperada debido al conflicto en Israel. Este proyecto, que abarca ferrocarriles, puertos y energía verde, había recibido elogios de líderes mundiales, como el Presidente de Estados Unidos, Joe Biden, quien lo calificó como un «gran negocio». Ursula von der Leyen, presidenta de la Comisión Europea, lo describió como un «puente verde y digital entre continentes y civilizaciones», mientras que el primer ministro indio, Narendra Modi, lo consideró «la base del comercio mundial durante cientos de años».
El IMEC prometía un enorme potencial al reducir los tiempos de envío en hasta un 40%. La demanda también era evidente, ya que el comercio total entre India y Arabia Saudí se duplicó en dos años, alcanzando los $53,000 millones en el ejercicio 2023. Sin embargo, el mayor beneficio para Nueva Delhi residía en fortalecer sus lazos comerciales con Europa, su tercer socio comercial más importante.
A pesar del estrechamiento de relaciones entre India y el Golfo, la materialización del corredor requiere un enlace fiable entre Arabia Saudí e Israel antes de que pueda enviarse mercancía desde el puerto de Haifa, recientemente adquirido por el grupo indio Adani, hacia Europa.