Problemas de envío y sequía amenazan la cadena de suministro, poniendo en riesgo el abastecimiento para la temporada navideña.
El Canal de Panamá se enfrenta a desafíos significativos que están generando preocupaciones en los mayoristas estadounidenses. Estas interrupciones actuales plantean inquietudes sobre la capacidad de reponer los inventarios de manera oportuna debido a los retrasos en los envíos. La continua persistencia de estos problemas podría desencadenar una escasez de productos durante el crucial período de compras de la temporada navideña.
Las dificultades en el Canal de Panamá están exacerbando las preocupaciones existentes en varias industrias. Datos recientes indican un repunte en el gasto de los consumidores en la economía estadounidense, lo cual es alentador. Sin embargo, la caída de los inventarios combinada con la previsión de una recuperación en la demanda, ejercen una mayor presión sobre el Canal de Panamá, responsable del 40% del movimiento de contenedores en la ruta Asia-Europa. Así lo señaló Christian Roeloffs, cofundador y CEO de Container xChange.
La conservación del agua dulce por parte de la Autoridad del Canal de Panamá, en medio de condiciones de sequía debido al fenómeno de El Niño, ha resultado en una acumulación de naves esperando transitar la vía. Actualmente, alrededor de 128 naves aguardan, en comparación con las 200 que estaban en espera. Medidas como restricciones en las reservas y ajustes en los requisitos de peso de los buques han agravado aún más los retrasos.
Lars Ostergaard Nielsen, jefe del centro de operaciones de líneas marítimas de Maersk para las Américas, ha destacado que las restricciones actuales del canal, que permiten un calado de solo 44 pies en lugar de los 50 pies habituales, han llevado a embarcar aproximadamente 2.000 contenedores menos por buque. Esta reducción de seis pies de calado tiene un impacto significativo.
Estos problemas han prolongado los tiempos de espera, que ahora han llegado a un máximo de 21 días, generando retrasos considerables en diversos segmentos de la industria del transporte marítimo, incluso resultando en recortes de capacidad. Fuentes de la industria como Alphaliner, Sea-Intelligence y Drewry han informado un aumento en las cancelaciones de itinerarios («blank sailings»). En los meses de junio y julio, alrededor del 10,8% de los itinerarios regulares entre China y Europa fueron cancelados, con patrones similares en las rutas del Transpacífico. Esto ha provocado un incremento en las tarifas spot.
Peter Sand, analista jefe de Xeneta, ha señalado que los efectos de El Niño podrían ser solo el inicio de un problema más grave en el primer semestre de 2024, lo que podría tener consecuencias significativas en los costos y la cadena de suministro.
La industria anticipa que los aumentos de costos, derivados de rutas alternativas y tiempos de entrega más largos, impactarán los gastos operativos de las líneas navieras, lo que a su vez podría trasladarse a empresas y consumidores. La congestión continua y la reducción de la capacidad están llevando a las líneas navieras a reconsiderar las estrategias de precios.
A pesar de las posibles precipitaciones futuras, los datos históricos sugieren que la liquidación del atraso acumulado podría ser un proceso prolongado incluso después de la eliminación de las restricciones de sequía.
El Canal de Panamá juega un rol esencial para los transportistas estadounidenses hacia los puertos del Golfo y la costa este de EE.UU. Dado que Estados Unidos representa el 73% del tráfico del canal, equivalente a alrededor de US$270 mil millones en carga, la situación actual tiene un impacto significativo en la economía y la cadena de suministro.
Las dificultades en el Canal de Panamá están exacerbando las preocupaciones existentes en varias industrias. Datos recientes indican un repunte en el gasto de los consumidores en la economía estadounidense, lo cual es alentador. Sin embargo, la caída de los inventarios combinada con la previsión de una recuperación en la demanda, ejercen una mayor presión sobre el Canal de Panamá, responsable del 40% del movimiento de contenedores en la ruta Asia-Europa. Así lo señaló Christian Roeloffs, cofundador y CEO de Container xChange.
La conservación del agua dulce por parte de la Autoridad del Canal de Panamá, en medio de condiciones de sequía debido al fenómeno de El Niño, ha resultado en una acumulación de naves esperando transitar la vía. Actualmente, alrededor de 128 naves aguardan, en comparación con las 200 que estaban en espera. Medidas como restricciones en las reservas y ajustes en los requisitos de peso de los buques han agravado aún más los retrasos.
Lars Ostergaard Nielsen, jefe del centro de operaciones de líneas marítimas de Maersk para las Américas, ha destacado que las restricciones actuales del canal, que permiten un calado de solo 44 pies en lugar de los 50 pies habituales, han llevado a embarcar aproximadamente 2.000 contenedores menos por buque. Esta reducción de seis pies de calado tiene un impacto significativo.
Estos problemas han prolongado los tiempos de espera, que ahora han llegado a un máximo de 21 días, generando retrasos considerables en diversos segmentos de la industria del transporte marítimo, incluso resultando en recortes de capacidad. Fuentes de la industria como Alphaliner, Sea-Intelligence y Drewry han informado un aumento en las cancelaciones de itinerarios («blank sailings»). En los meses de junio y julio, alrededor del 10,8% de los itinerarios regulares entre China y Europa fueron cancelados, con patrones similares en las rutas del Transpacífico. Esto ha provocado un incremento en las tarifas spot.
Peter Sand, analista jefe de Xeneta, ha señalado que los efectos de El Niño podrían ser solo el inicio de un problema más grave en el primer semestre de 2024, lo que podría tener consecuencias significativas en los costos y la cadena de suministro.
La industria anticipa que los aumentos de costos, derivados de rutas alternativas y tiempos de entrega más largos, impactarán los gastos operativos de las líneas navieras, lo que a su vez podría trasladarse a empresas y consumidores. La congestión continua y la reducción de la capacidad están llevando a las líneas navieras a reconsiderar las estrategias de precios.
A pesar de las posibles precipitaciones futuras, los datos históricos sugieren que la liquidación del atraso acumulado podría ser un proceso prolongado incluso después de la eliminación de las restricciones de sequía.
El Canal de Panamá juega un rol esencial para los transportistas estadounidenses hacia los puertos del Golfo y la costa este de EE.UU. Dado que Estados Unidos representa el 73% del tráfico del canal, equivalente a alrededor de US$270 mil millones en carga, la situación actual tiene un impacto significativo en la economía y la cadena de suministro.