Precios podrían subir hasta un 36% en el Mediano Plazo debido a la escasez de agua en el Canal de Panamá.
El Canal de Panamá, una vía de tránsito vital para el comercio internacional, se enfrenta a serios desafíos que amenazan su operación eficiente. Dos factores principales, el cambio climático y el fenómeno del Niño, están afectando los niveles de agua en el canal, lo que tiene graves repercusiones en la cadena de suministro a nivel mundial.
Impacto en la Capacidad de Navegación:
La falta de lluvia ha reducido los niveles de agua en el Canal de Panamá, lo que ha disminuido el calado necesario para el paso seguro de buques de gran capacidad. Como resultado, el canal se ve obligado a limitar el tamaño de los barcos que pueden transitar por sus aguas. En lugar de los 36 buques diarios habituales, ahora solo pueden transitar 32 de menor tamaño. Esto ha generado largas colas de buques esperando su turno, con esperas de hasta 20 días, lo que resulta en pérdidas millonarias para diversas industrias.
Impacto en el Comercio Internacional:
El Canal de Panamá es un punto crítico en el comercio internacional, con el 6% del comercio marítimo global pasando por sus aguas, atendiendo a 180 rutas esenciales. Los retrasos en la entrega de materias primas y productos de temporada están causando desabastecimiento y retrasos en la producción. Esto afecta a una amplia gama de productos, incluyendo granos como trigo, maíz y arroz, así como productos petroleros y otros agrícolas.
Reservas y Problemas de Transporte:
Es importante destacar que las reservas para pasar por el Canal se realizan con un año de anticipación. Aquellos que no tienen reservas enfrentan problemas significativos, con esperas de hasta 14 días. Esto afecta especialmente a los transportistas de productos críticos, como petróleo, gas y granos, que requieren condiciones específicas de calado para una navegación segura y eficiente.
Impacto en Costa Rica:
Costa Rica no es ajena a estas dificultades, ya que depende en gran medida de las importaciones y exportaciones a través del Canal de Panamá. Productos clave, como maíz, frijoles de soya, fertilizantes, trigo, hierro, vehículos y más, podrían verse afectados, lo que a su vez impactaría en los costos y la disponibilidad de estos productos en el mercado local.
Aumento de Costos y Tarifas:
Los retrasos y las restricciones de calado pueden aumentar los costos operativos para las líneas navieras y operadores de barcos. Esto podría traducirse en un aumento de las tarifas de peaje del canal, lo que impactaría directamente en los precios de los productos y las decisiones de envío de las empresas. Se estima que el costo de transporte marítimo aumentará aproximadamente un 36% para el 2024 debido a estos factores.
Rutas Alternativas y Competitividad:
Ante la persistencia de problemas en el Canal de Panamá, las líneas navieras podrían optar por rutas alternativas, como el Cabo Buena Esperanza, el Cabo de Hornos en América del Sur y el Canal de Suez para rutas comerciales que involucren Europa y Asia. Esto afectaría negativamente la competitividad y la importancia del Canal de Panamá como vía clave de tránsito.
Replanteamiento de Rutas y Tratados de Libre Comercio:
En respuesta a estos desafíos, es imperativo que las empresas evalúen sus costos logísticos y consideren rutas alternativas para reducir el riesgo de interrupciones en la cadena de suministro. También es necesario revisar los tratados de libre comercio para buscar oportunidades de mejora. La colaboración y comunicación efectiva con proveedores y aliados son clave en momentos de crisis para evaluar diferentes estrategias.
En resumen, la escasez de agua en el Canal de Panamá está generando un impacto significativo en la cadena de suministro global, lo que se traducirá en mayores costos y desafíos para las empresas. Es crucial tomar medidas proactivas para mitigar estos efectos y garantizar la continuidad del comercio internacional.