Líderes de la industria marítima se reúnen en Santiago para discutir cómo la descarbonización del transporte marítimo puede generar nuevas perspectivas de inversión en América Latina.
Con el propósito de analizar los desafíos y las posibilidades relacionadas con la descarbonización del transporte marítimo para las naciones latinoamericanas en el marco de la Estrategia de Reducción de Emisiones de Gases de Efecto Invernadero (GEI) de la Organización Marítima Internacional (OMI), se ha llevado a cabo el foro titulado «Implementación de la Estrategia de la OMI para la Reducción de Emisiones de GEI: Identificación y Promoción de Oportunidades de Inversión». Este evento, organizado por la OMI en colaboración con el Gobierno de Chile, tuvo lugar en la sede de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal) en Santiago de Chile.
El encuentro fue presidido por Arsenio Domínguez, director de la División de Medio Marino de la OMI y próximo secretario general de dicha organización. En la jornada inaugural, se contó con la participación de destacadas figuras como María Heloísa Rojas, Ministra del Medio Ambiente de Chile; Diego Pardow, Ministro de Energía de Chile; Andrés Rebolledo, Secretario Ejecutivo de la Organización Latinoamericana de Energía (Olade); y el Almirante Juan Andrés De La Maza, Comandante en Jefe de la Armada de Chile, entre otras autoridades y representantes del sector marítimo y energético de la región.
Durante el evento, que se desarrolló los días 28 y 29 de agosto, se reconoció la importancia fundamental que tiene el transporte marítimo en la economía global. Sin embargo, también se subrayó que este sector es responsable de aproximadamente el 3% de las emisiones de carbono a nivel mundial, lo que implica la necesidad de implementar nuevas herramientas y regulaciones para lograr una reducción progresiva y efectiva de su huella de carbono. En consonancia con la Estrategia de la OMI, se abordó la manera en que esta industria puede estimular inversiones, aprovechando el amplio potencial de energías renovables en América Latina, al tiempo que se mitigan los posibles impactos negativos.
Durante la inauguración, Arsenio Domínguez hizo un llamado a los países de la región para cooperar en este ámbito. En este sentido, expresó que «este foro demuestra nuestra capacidad para cooperar y debemos incluir este diálogo en las estrategias nacionales, utilizando agencias de las Naciones Unidas como Alade, Cepal, entre otras, para desarrollar conversaciones centradas en desafíos y oportunidades mutuas».
La Ministra del Medio Ambiente de Chile, María Heloísa Rojas, señaló que «las exportaciones chilenas dependen en gran medida del transporte marítimo, lo que convierte al desafío de la descarbonización en una prioridad. Nos hemos comprometido a ser neutrales en carbono para 2050 y estamos comprometidos en abordar este desafío de manera intersectorial, reconociendo la importancia de proteger nuestros océanos».
Andrés Rebolledo, Secretario Ejecutivo de Olade, destacó el papel de esta organización en apoyar el desarrollo de políticas energéticas en la región. En este contexto, enfatizó que «las políticas de descarbonización son un tema central en la región, no solo en la generación eléctrica sino también en sectores como el transporte marítimo. Ponemos nuestros instrumentos a disposición de los países para avanzar en esta dirección».
Durante la primera jornada, los expertos y representantes de la región abordaron temas cruciales como la «Acción climática regional y los esfuerzos de la OMI para reducir las emisiones de GEI en el transporte marítimo», «El papel del transporte marítimo en la acción climática y la transición» y las «Perspectivas nacionales sobre las oportunidades que ofrece la descarbonización del transporte marítimo». La segunda jornada, el 29 de agosto, se centró en temas como la «Financiación de la descarbonización del sector del transporte marítimo y la promoción de combustibles renovables en América Latina», culminando con la presentación de conclusiones y lineamientos futuros en esta área.
