Durante las primeras horas del 22 de noviembre la paralización de camioneros, que había iniciado en el norte de Chile y algunas zonas de la región Metropolitana, se extendió a la región de Valparaíso y a la de O´Higgins (en la zona central del país). En las principales rutas de las ciudades se congregaron grupos de transportistas, concentrándose principalmente en la Ruta 68, generando atochamiento vehicular e impidieron el paso de camiones, exigiendo acuerdos para paliar el alto precio del combustible y mejores seguridad.
Se espera que la situación empeore, pues a la movilización, que fue iniciada por la Confederación Gremial Transportistas Fuerza del Norte, se sumó la Confederación Nacional de Transporte de Carga (CNTC), y todos sus asociados, entre ellos la Federación de Dueños de Camiones de la V Región (Fedequinta). Cabe mencionar que el día lunes 21 de noviembre el Gobierno y Sergio Pérez, presidente de la CNTC, firmaron un acuerdo atendiendo a las demandas de los transportistas, sin embargo, el gremio posteriormente desconoció el trato. “El lunes el Gobierno entregó propuestas que no estamos dispuestos a aceptar y se votó definitivamente la movilización a la espera que nos puedan llamar de nuevo al diálogo, pero lamentablemente con una presión distinta”, dijo el presidente de Fedequinta y vicepresidente de la CNTC, Iván Mateluna.
En tanto, desde el Gobierno, el subsecretario del Interior, Manuel Monsalve, dijo que “hemos tenido espacios de diálogo con los camioneros y hemos hecho una propuesta que permitió la firma de un acuerdo. No hay un fundamento en que el paro de camioneros continúe. Menos fundamento hay para que quienes estuvieron sentados en la mesa, estuvieron horas conversando y alcanzaron un acuerdo, después desistan de ese acuerdo, como es el caso de la Confederación Nacional del Transporte de Carga”, sentenció.
Monsalve agregó que “vamos a usar todas las herramientas que nos da el Estado de derecho. Si eso implica usar la Ley de Seguridad del Estado, el gobierno va a usar la Ley de Seguridad del Estado”. En esa misma línea, la delegada Presidencial Región de Valparaíso, Sofía Gonzalez, dijo que «ya dimos la instrucción de comenzar el despeje de las rutas por parte del personal policial”.
Por parte de la Confederación Gremial Transportistas Fuerza del Norte, indicaron en un comunicado que la “movilización continuará de forma indefinida”, y donde el principal punto de conflicto está dado por el precio del combustible. El Gobierno “solo ofrece un beneficio de inyección de dinero al Mepco (Mecanismo de estabilización de precios de los combustibles), de US$1.500 millones para garantizar el control de la variación del precio del combustible diésel, por un período de seis meses”, lo que para el gremio no sería suficiente.
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