A medida que el año llega a su fin, la condición del mercado logístico global sigue congestionada, pero la perspectiva de un enfriamiento del mercado parece ser posible.

Según Transport&Intelligence, la disfunción en muchos puertos importantes sigue siendo un problema, sin embargo, las carreteras parecen haberse convertido en uno más importante en ciertos lugares. Por ejemplo, el puerto de Los Ángeles y Long Beach se ha abstenido de imponer una «tarifa de permanencia del contenedor» debido a que el puerto dice que hubo una reducción del «47% en la carga con sobrestadía en los muelles». Todavía se prevé imponer la tarifa hoy 20 de diciembre, con la propuesta de que se cobre a las líneas navieras US$100 por cada contenedor que aún esté en el muelle después de nueve días, aumentando en US$100 por día.

Todavía hay largas colas de buques fuera del puerto de Los Ángeles, pero parece que las amenazas de impuestos tan extremos al menos han desplazado algunos de los problemas de congestión fuera de las terminales.

Es cierto que muchos de los problemas subyacentes que han estado causando el fracaso de los sistemas de logística marítima persisten. Por ejemplo, el puerto de Ningbo está experimentando problemas agudos relacionados con un brote de COVID-19 en la provincia de Zhejiang, zona industrial importante y cualquier ralentización del tráfico de contenedores fuera de aquí interrumpirá la ruta Transpacífico en particular. La naturaleza de las políticas COVID-19 de China seguirá siendo un factor importante de inestabilidad a medio plazo.

Sin embargo, lo que pueden ofrecer los dos primeros trimestres de 2022 es la perspectiva de que un número creciente de buques portacontenedores nuevos entren en servicio.

El panorama no es seguro, pero probablemente haya alrededor de una capacidad de 1 millón de TEUs destinados a la entrega en 2022 y esto debería tener al menos algún impacto tanto en los precios como en la congestión. Es cierto que esto último puede verse más influido por el crecimiento del tamaño de la flota de contenedores y el número de contenedores mal posicionados.

Probablemente, la variable más importante será la velocidad y la naturaleza del crecimiento económico. La principal razón para la congestión portuaria ha sido la enorme expansión del gasto público en los EE.UU. y la consiguiente explosión de las exportaciones de China, pero también de otros lugares como el sudeste asiático.

La probabilidad es que EE. UU. experimente aumentos moderados de las tasas de interés en 2022 y esto podría desacelerar un poco el crecimiento, sin embargo, de mayor importancia podría ser la posibilidad de que la demanda se vuelva menos instable. Esto ofrece la esperanza de que las tarifas y la congestión no empeoren, o al menos la certeza de que las cosas mejorarán.

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